El sutil arte de que te importe un c@r4jo.
“Maturity is what happens when one learns to only give a fuck about what’s truly fuckworthy. As” - Mark Manson
No sabía que era un libro tan popular, me llamó la atención la cantidad de comentarios, reacciones y preguntas que recibí después de publicar una historia con la portada del libro. Supongo que el título atrae y que muchas personas buscan cómo restarle importancia a las cosas que no lo tienen.
Aunque debo confesar que en mis incursiones a la librería a veces me dejo llevar por las portadas o por los títulos de moda, en este caso fue el nombre del autor lo que me llamó la atención. Mark Manson es un tipo al que he escuchado en algunas entrevistas y podcasts.
En los últimos años me he convertido en un ávido consumidor de podcasts. Vivir sólo implica invertir una cantidad considerable de tiempo en quehaceres domésticos que se hacen en solitario: cocinar, lavar platos, cocinar, barrer, lavar la ropa, volver a lavar platos (¿se reproducen sólos?) y por supuesto regar las plantas. Encontré que algunos de estos momentos de quehaceres domésticos se vuelven más útiles y entretenidos si llevo mis audífonos y escucho entrevistas, podcasts o cursos.
Fue así que llegué a conocer a Mark Manson por una entrevista con Lewis Howes, porque claro, nunca sobran los hombres blancos norteamericanos que nos enseñan cómo mejorar nuestras vidas, en fin.
En cuanto encontré su libro “el sutil arte de que te importe un carajo” no pude evitar echar un ojo al precio y me pareció razonable, lo empaqué bajo mi brazo junto con un par de títulos más y seguí con la cacería, mi técnica es tomar 4 o 5 libros mientras exploro los anaqueles y en el último momento de camino a la caja, decido los cuáles me llevaré.
En lo personal creo que es un libro entretenido aunque el lenguaje coloquial me resultó incómodo, no por lo coloquial sino por la sensación artificial que me dieron algunas frases (se lo atribuyo a la traducción). El libro presenta ejemplos y escenarios con problemas reales, cotidianos y cercanos a la persona común lo que hace fácil engancharse con la narrativa, volé sobre las páginas que resultan ligeras y entretenidas.
A pesar de no encontrar muchas ideas nuevas (si es que estas existen) y más bien, enfrentarme a una especie de estoicismo diluido y bien empacado en bloques, el estilo del autor es franco, directo y sin complejidades innecesarias, eso se agradece.
Un par de ideas puntuales que llamaron mucho mi atención hacen referencia directa a problemas habituales enfrentamos hombres con cierto grado de privilegio, el autor bordea temas de responsabilidad afectiva, reinterpretación de las masculinidades y revisión de los valores personales de una forma que pareciera no hacer una alusión directa.
Me parece una gran forma de hacer llegar estos mensajes a una población que decididamente se rehúsa a enfrentar ciertos conceptos que los atañen: Privilegio, machismo, compromiso, responsabilidad. En lo personal, me llegó la forma en la que habló respecto a las relaciones de pareja ¿sorpresa? Para mi no, valoro que alguien hablé de estos temas de forma honesta y sin pretensiones.
El libro tiene muchos capítulos e historias entretenidas, algunas anécdotas personales que resultan conmovedoras. Acá les comparto tres lecciones prácticas que quiero rescatar:
En el compromiso hay una libertad y una liberación. El compromiso te brinda libertad porque ya no estás distraído en lo que no tiene importancia y lo frívolo. EL compromiso te da libertad porque perfecciona tu atención y tu perspectiva.
Viajar es una fantástica herramienta de desarrollo procinal, porque te libra de los valores de tu cultura y te muestra diferentes (...) Esta exposición a diferentes valores te obliga a reexaminar lo que parece obvio en tu vida y a considerar que quizá no es necesariamente la mejor manera de vivir.
Hay un simple detalle del que se deriva todo mejia personal y todo crecimiento: La comprensión de que somos, individualmente, responsables de todo en nuestras vidas, sin importar las circunstancias externas. No siempre controlamos lo que nos sucede, pero siempre controlamos cómo interpretamos lo que nos sucede y cómo respondemos a ellos.
Haciendo un recuento de los párrafos que llamaron más mi atención, no puedo dejar de pensar en Epicteto y en Marco Aurelio. La filosofía estoica está viviendo un momento de popularidad inmenso, con sus pros y sus contras. En su lado más brillante promueve la responsabilidad y la agencia personal como un vehículo para la virtud y el crecimiento personal, por otro lado, puede interpretarse de tal forma que replique los discursos de meritocracia y autosuficiencia que no sólo no ayuda a resolver los problemas socioambientales actuales, si no que en algunos casos, los acentúa y réplica condiciones que buscamos cambiar.
Como quiera que sea y siendo generoso con la percepción, este es un libro ligero, entretenido y confrontativo. Tiene ideas profundas que por el tipo de lectura y el espacio no se profundizan tanto. Recomendaría este libro para quien empieza su camino en el estoicismo y el desarrollo personal, pero no sin complementar la lectura con otras opiniones y textos más profundos.
